Cortamos los tallos de las zanahorias dejando un par de centímetros.
Lavamos las zanahorias y las pelamos.
Colocamos las zanahorias en fila sobre una bandeja de horno forrada con papel de hornear.
En un cuenco, echamos la miel y la calentamos un poco en el microondas para fundirla.
Añadimos el aceite, el ajo picado en trozos pequeños y el romero.
Removemos bien para integrar todo.
Echamos la sal sobre las zanahorias y a continuación repartimos la mezcla sobre ellas.
Horneamos con el horno precalentado a 180ºC durante 40 o 45 minutos o hasta que al pinchar la zanahoria ésta esté tierna.
Sacamos del horno con cuidado y servimos inmediatamente.
TIP1: Si las zanahorias son muy grandes, puedes partirlas por la mitad a lo largo para así reducir el tiempo de horneado y que queden tiernas.
TIP2: Para mi es ideal pelar las verduras con un pelador. Quitamos lo justo para retirar la piel y las piezas se aprovechan al máximo. Si no tienes uno...¡Te lo recomiendo!