
No todo lo que viene de Italia es pasta o pizza. Si nos vamos al mundo de la respostería, los italianos tienen elaboraciones maravillosas que merecen (y mucho) ser descubiertas.
Hoy te presento a los bomboloni, unas deliciosas bolas que nos recuerdan a las berlinas o krapfen, pero de un tamaño menor, y que pertenecen a un grupo de dulces llamados fritelle, que como bien habrás imaginado, tienen en común que todos ellos se acaban por freír.
Los bomboloni son unas bolas casi de bocado, esponjosas y ligeras, que están rellenas de crema de chocolate y con azúcar en su exterior. Normalmente se rebozan con azúcar blanco aún calientes, pero yo he preferido espolvorear un poco de azúcar glass.
Te dejo a continuación con la receta.
Espero que la disfrutes.


Bomboloni
Ingredientes
- 300 g harina panadera
- 45 g mantequilla en pomada
- 1 huevo "M"
- 50 g azúcar
- 5 g levadura fresca
- 70 g agua
- 80 g leche
- 1 cucharada esencia de vainilla
- 5 g sal
- azúcar glass al gusto para espolvorear
- crema de cacao y avellanas para rellenar
- aceite de oliva virgen extra abundante para freír
Instrucciones
Para el prefermento:
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Calienta en un cuenco la leche y el agua y deshacer en ella la levadura.
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Agrega 70g de la harina y remueve para integrar y que no queden grumos.
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Deja reposar el prefermento tapado y a temperatura ambiente durante 40 minutos.
Para la masa final:
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En un bol, echa la harina restante, el azúcar, la sal, la vainilla, el huevo y el prefermento ya activo. Amasa bien con la amasadora con el accesorio de gancho o bien a mano hasta ver que el gluten se empieza a desarrollar y la masa tiene un aspecto homogéneo.
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Agrega la mantequilla en pomada poco a poco y sigue amasando. La masa se vuelve más pegajosa hasta que la acepte completamente. Al final del amasado, la masa seguirá siendo algo pegajosa, pero manejable y tendrá el gluten desarrollado.
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Pasa la masa a un bol ligeramente aceitado y deja que repose, tapada, toda la noche en la nevera.
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A la mañana siguiente, saca la masa del frigorífico y haz bolas de igual tamaño con ellas. Éstas deben ser de unos 10g de peso.
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Coloca las bolitas sobre papel de horno y deja que reposen, tapadas, a temperatura ambiente durante 40 minutos o hasta que veas que casi han doblado su tamaño.
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Calienta abundante aceite de oliva en un cazo y mientras tanto, recorta el papel de horno para dejar cada bolita de manera individual sobre su papel.
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Cuando el aceite esté caliente, ve friendo las bolitas hasta que las veas doraditas (1 minuto por cada lado). Para ello, solo debes manipular el cuadradito de papel de horno. No frías más de 4 ó 5 a la vez. Verás como cuando las frías, aumentan su tamaño por tercera y última vez.
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Una vez fritos, coloca los bomboloni sobre un plato con papel absorbente para eliminar el aceite sobrante. Repite el proceso hasta freírlos todos.
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Si quieres rebozarlos con azúcar blanco, ahora es el momento, mientras aún están calientes, de lo contrario, deja templar.
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Rellena cada bomboloni con la crema que quieras, yo he usado crema de cacao y avellanas.
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Espolvorea al gusto con azúcar glass.
Notas
TIP1: Ten cuidado con el tamaño del cuenco en el que haces el prefermento, ya que éste aumentará su volumen y podría salirse si es demasiado pequeño.
TIP2: Al inicio, y al agregar la mantequilla, la masa es más pegajosa, por lo que usar una amasadora puede facilitar el proceso.
TIP3: Para hacer las bolas de masa y lograr que todas sean iguales, puedes pesar cada porción de masa, o bien enharinar levemente la mesa de trabajo y estirar la masa dejándola del mismo grosor y cortar porciones con un cortador. De esta manera te aseguras de que todas las porciones son iguales.
Si eliges el segundo método, junta los recortes de masa, amasa para cohesionarlos y deja reposar en la nevera 15 minutos antes de volver a estirar para sacar más porciones. Repite el proceso hasta agotar la masa.
TIP4: Ten mucho cuidado cuando trabajes con aceite caliente. Usar el papel de horno facilita mucho el trabajo, por lo que te recomiendo que lo utilices. No tengas miedo de que el papel toque el aceite caliente o si cae dentro, no arde ni se quema.
TIP5: El fundamental controlar la temperatura del aceite durante la fritura, ya que si está demasiado suave, la masa lo absorberá y quedará grasienta y si está demasiado fuerte, los quemaremos por fuera pero quedarán crudos por dentro.



He dejado alguno sin rellenar para que se pueda apreciar la miga. Como ves, es una miga ligera, aireada, suave. Sin duda, este es un dulce que no puedes dejar de hacer.
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